La Jibaja le cae mal a mucha gente: a la vieja amargada, a la puritana, a la chiquilla santurrona, al moralista y, sin duda, a la jueza que la metió en la carcel.
Verla entre rejas nos muestra lo estúpido que es nuestro país: 4 cusqueños borrachos violan a una ciudadana Belga y no pasa nada, los dejan salir "por falta de pruebas". En el Callao los asesinos se pasean como Pedro por su casa y no pasa nada. Una banda de cuello blanco trafica con los préstamos del Banco de Materiales, y no pasa nada.
Angie se pelea en una Disco, como todos algunas vez lo hicimos, en esa gresca sale mal parada la otra púgil y la actríz es condenada inmediatamente. No cumple con la humillante firma mensual y en el acto la justicia funciona(como nunca): es ordenada su captura, detenida, enmarrocada y encarcelada.
Considero a la Jibaja una artista. Es sumamente sexy provocadora y desprejuiciada. Libre hasta la médula y de reacciones tan desproporcionadas como sus labios. Esto lo cree también el público chileno, pues la ha convertido en su engreída después del "Rey de los huevones".
La película es chilena; los huevones: los del poder judicial que la han encarcelado.
1 comentario:
Esa foto esta muy buena. Angie conocera el origen de la palabra "Criollita" en la carcel.
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